Su bebé, gracias

El otro día estaba ordenando el armario del baño. Pasa de vez en cuando, pero cuando pasa me vuelvo loca tirando restos de jabones, champús caducados, muestras de perfume, cremas empezadas hace mil años... ¡¡¡Para, para, para!!! ¡¿Acabas de tirar el purelán?! Volví a la basura. Metí la mano y rescaté el tubo amarillo para devolverlo... Leer más →

Crea un sitio web o blog en WordPress.com

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: