Despedida

Me picó un pez venenoso. Di un paso, dos y al otro su púa, la primera o la última de las tres que tenía, se me inyectó en la planta del pie. Un veneno sutil pero certero que hizo que la punzada se repitiera, picante y pesada hasta el puesto de la Cruz Roja y... Continue Reading →

Crea una web o blog en WordPress.com

Subir ↑